Sugerir que si Macnelly al tercer partido no nos ha llevado a la gloria lo tumbaremos es injusto con la hinchada. Recordemos cuánto tiempo esperamos a Héctor Hurtado: tres años hasta que se destapó y nos regaló otros dos años de fútbol brillante, sobre todo cuando hizo esa yunta con Edixon Perea y luego con Aristi y Huguito y Que triunfó en el 2005. El mismo Morales tuvo un semestre muy flojo cuando llegó en el 2004 y la tribuna no se metió con él y fue nuestro conductor en ese 2005, que arrancó con aquel golazo a Tombolini. Del 2007 en adelante no puedo hablar con certeza porque no he pisado el estadio pero me parece que a Arrué, tan flojo como fue, se le respetó.
La hipersensibilidad del hincha empezó hace unos tres años y fue por ella que al gran Gio no le perdonaron media siendo uno de los más brillantes futbolistas que ha vestido la Sagrada Camiseta (hablo en tercera persona porque para mí es un Ídolo) y empezaron a cobrarle a los jugadores las torpezas de técnicos y dirigentes.
Antes, ni siquiera con Cheché que nos trajo ese tapao de Martìn Zapata y ha sido de los peores la gente se metió. Soportamos estóicamente a Navarrete en el 2000 y la novatada de Alexis poniendo a Rafa Castillo de marcapuntas.
Mejor dicho, los Hinchas Verdes tradicionalmente recibíamos con gran tranquilidad los cambios en la nómina porque siempre el que llegaba era bueno y el compás de espera el jugador lo vivía sin presiones porque la gente confiaba en él y en el técnico. De un tiempo para acá, con mucho de razón por los errores directivos nos hemos vuelto intransigentes.
Anteriormente considerabamos que si un jugador no rendìa no era por perezoso ni marrullero. Decíamos, no encaja en el esquema y salía, tal vez sin pena ni gloria, pero nunca vituperado. Pasó con Raúl Peñaranda, Héctor Céspedes, Aldo El Pichón Rodríguez, con Rubén Paira, Con Miguel Ángel Bordón y con Hugo Osmar Perotti (llegó lesionado).
Ni siquiera cuando América se llevó la carne pulpa y nos dejó los desgordes vilipendiamos a los jugadores. Nos tuvimos què tragar a Vìctor Lugo, Hebert González y Antonio Palacio sin chistar.
Bueno, me estoy alargando en un tema que no da para tanto.
Hoy por hoy debemos respirar optimismo. Tenemos una buena nómina y Macnelly no estará solo y lo más importante, la actitud del el presidente hasta el más humilde de los hinchas es una actitud ganadora. Cierro, estamos construyendo un equipo para triunfar.
Miguel Robledo Restrepo, 55 años, Santa Bárbara-Antioquia. Hincha Verde desde 1964.
Tomado de: Capsulas De Futbol
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